Si es que se algo a ciencia cierta, es que vuelvo a ser la mujer egoísta que se centra en ella misma
tan terca como ella sola, vive ilusa y a la vez, muy cercana a la realidad.
Muchas veces la han lastimado, se ha lastimado pero lo importante es que ha aprendido.
Vive en un mundo en donde muchas veces se ama tanto que ciega todo lo que la afecte de alguna manera
Ella es consciente de eso, claro, también es consciente de que le sobran razones para enloquecer.
Es consciente también de una rara enfermedad mental que padece, lo que la hace algo especial y rara;
sabe bien lo que quiere y es feliz por eso, pero no sabe bien con quién compartir tal felicidad.
Hace poco la abandonaron cuando ella lo dio todo, la defraudaron y ella se encargó de defraudar
y causar el triple de daño que recibió.
Ha sido la primera vez que lo intentó, eso de tomar una pequeña venganza  también aprendió.
Ahora mira soledad a su alrededor, soledad de la más cruel, oscuridad, es una luna que dejó de brillar
porque ya no quiere ser luna...no quiere depender de los rayos del sol para proyectar brillo.
Ella ahora que empieza a disfrutar canciones que dejó olvidadas debido a varias circunstancias,
prefiere seguir siendo el guepardo que siempre se sintió ser, un alma ágil y felina que es solitaria
pero astuta, además de amorosa con quien sabe acercarse a ella.